Amo la reacción de las personas cuando les digo la carrera que elegí. Como si la palabra "Literatura" fuera aún peor que no estudiar nada en absoluto. Pero DIOS. MIO. su cara de incredulidad y decepción es la mejor parte, como si esperaran que todos quisiéramos encontrar la cura del cáncer o gobernar países.
"No, yo sólo quiero escribir novelas"
Sé que su principal interés por escuchar mi carrera es que ésta sea "económicamente estable", ¿pero qué demonios se supone que eso signifique?
Es decir, actualmente mi familia subsiste de la repostería ¿y saben algo? Son los mejores jodidos pasteles del mundo y somos felices aún si no vivimos a base de un sueldo fijo.
Lo que quiero decir es que entiendo la importancia del dinero en orden de subsistir, pero considero mucho más importante ser alguien feliz y la literatura en general (con todos sus géneros) es algo que me ha hecho feliz toda la vida.
En realidad, ni siquiera creo que lo haya elegido. Simplemente en cierto punto, la literatura estaba en tantos aspectos de mi vida que comencé a compartir en voz alta mis deseos y tiempo después, estaba llenando el papeleo de la universidad con ficha en la carrera "Lengua y Literatura".
Y aunque han habido momentos en que estoy a punto de tirarlo todo por la borda y decir "A la mierda con esto" mis libros son algo a lo que siempre vuelvo. Y si no es con mis novelas, me encanta releer buenas obras y escribir tonterías como justo ahora que no estoy en buenos términos con mis libros.
Los últimos meses han sido difíciles para mis obras y por eso mismo estoy ansiosa por la universidad. No tendré excusa para no leer y voy a tener que redactar a morir. ¡Mi sueño hecho realidad!
Y sé que no tengo que estudiar literatura para ser escritora, pero me gustaría también poder editar textos formalmente y tal vez, aunque por el momento no llame mi atención, impartir clases y seguro que un diploma universitario me dará mayores posibilidades de hacerlo.
A lo que trato de llegar es que estoy cansada de que a las humanidades se les vea como si valieran muy poco y siendo sincera, siento que si más personas se educaran por medio de la literatura, tendrían una mejor visión del mundo y eso es lo que más amo de mi trabajo, que la literatura puede cambiar mentes.
-Melissa